PENSAMIENTOS DEL BEATO NICOLÁS BARRÉ
- El corazón orgulloso y suficiente obliga a Dios a subir más alto y a alejarse. “Cuando el hombre busca engrandecerse, Dios tiende a alejarse aún más”. Por el contrario, un corazón humilde, cuanto más se rebaja, más se acerca Dios a él: “Resiste a los orgullosos, da su gracia a los humildes”.
- En la oración, y para la oración, es muy bueno llenarse de espíritu, o de las virtudes de Jesús, o de las grandezas de Dios, sus atributos, etc.
- No basta hablar de las cosas de Dios. Hay que hacerlo en el Espíritu de Dios, y por el Espíritu de Dios. De otra forma, el espíritu de vanidad se insinúa y corrompe todo. Para evitar este mal, antes y después de actuar, hay que permanecer recogido y dependiente del Espíritu de Dios.
- El respeto al prójimo debe estar lleno de amor, y este amor es santamente crucificante.
- Tendríamos que morirnos de vergüenza cuando simulamos amar a Jesús, siendo así que en realidad no le amamos en absoluto; ya que en verdad no amamos a sus miembros, y no tenemos afecto al prójimo, del que el más pequeño de entre ellos es su imagen.
- Si amo verdaderamente a mi prójimo, el dolor de verle perecer debe apagar el gozo que experimento al verme sobre el camino de la salvación eterna.
- El alma muerta en sí misma actúa para su prójimo con mucha más fuerza que para sí misma.
- Esta disposición de adorar a Dios profundamente pone al alma en la práctica de la presencia de Dios, en una gran sabiduría y modestia en todas sus acciones, y en una paciencia actual en las contrariedades y adversidades, por respeto hacia la majestad soberana, delante de la cual uno se humilla perpetuamente en espíritu.
te puedes descargar una pequeña biografía del Beato Nicolás Barré y sus pensamientos.
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