Orar
Hablad al corazón

II - RECORRIENDO EL ADVIENTO JUNTO AL PROFETA ISAÍAS

 

HABLAD AL CORAZÓN, GRITAD BIEN ALTO

 

TERCER IMPERATIVO - “hablad al corazón de Jerusalén”

El verbo consolar y el verbo hablar al corazón aparecen también juntos en Gn 50, 21: José a sus hermanos les consuela y les habla al corazón a pesar de lo que hicieron con él.

Hablar al corazón es una expresión de afecto, de cercanía, de una palabra que llega dentro, no es hablar al oído, que ya sería interesante, sino hablar al corazón, que la palabra llegue dentro. Esta es la forma de consolar, con palabras que le lleguen al corazón.

Esta misma expresión aparece en otros textos que nos reflejan lo que es hablar al corazón según el Antiguo testamento: Gn 34, 2 Jamor intenta convencer a Dina, hablarle al corazón, enamorarla. En Jueces 19, 3 un levita, cuyo nombre no sabemos, intenta convencer a su mujer que lo abandonó, para que vuelva, entonces le habla al corazón, es un convencimiento de amor. En Rut 2, 13 también unido a consolar, Booz el futuro marido de Rut, le habla al corazón y la consuela. Y Oseas 2, 16 dice: Voy a llevar a mi esposa al desierto y le hablaré al corazón para seducirla otra vez”. El desierto como lugar para hablar al corazón.

Por tanto hablar al corazón es saber llegar dentro, convencer, enamorar. Pues esto es lo que pide Dios que se haga con Jerusalén.

 

CUARTO IMPERATIVO- “Gritad decidle bien alto”

¿No es contradictorio hablar al corazón gritando, no tendría que ser más bien suave? ¿Por qué se dice aquí gritad?

El grito es el grito de los profetas, como el grito de la sabiduría en Proverbios 1, 20 y 8, 1. 4. Es el grito público, convencido y firme de una verdad muy segura. Por lo tanto los dos verbos: hablar al corazón y gritar hay que leerlos en relación. Es decir interioridad y convencimiento, intimidad y publicidad.

Después viene un triple por qué, que son los contenidos de lo que hay que gritar. El primero: “que se ha cumplido su servicio, su milicia” Este servicio se utilizaba también para el servicio militar en hebreo. Aparece en Job, en Levítico. Es como si Israel hubiera tenido que cumplir un servicio forzado, entonces ya se ha cumplido.

En segundo lugar: “Ya se ha pagado su culpa”, es decir que este trabajo forzado ha sido por una culpa del pueblo.

En tercer lugar: “ha recibido de la mano de Yahvé doble castigo por todos sus pecados”.

El castigo ha sido fruto del pecado del pueblo, de la culpa. Castigo es lo mismo que servicio y es fruto de la culpa y del pecado.

¿Qué significa el doble castigo?

Puede significar dos cosas: Hay algunos autores que lo relacionan con Éxodo Cap. 22, 3-8. Cuando un ladrón roba un reloj tiene que devolver dos, quizá sea ese motivo; porque Israel ha sido el ladrón de la gloria de Israel y tiene que pagar el doble. También puede significar que no hay relación entre pecado y castigo, que ha habido un sobrecastigo para el pueblo. Lo que sí aparece claro es que lo ha recibido de la mano de Yahvé. El castigo es obra de Yahvé no de Babilonia.

Curso sobre Isaías por D. Manuel Pérez Tendero sobre el Prólogo del II Isaías, Is 40, 1-11

Dado en Daimiel, Monjas Mínimas