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¡ES CUESTIÓN DE AMOR¡
Sí, hermanos todos, la vocación es cuestión de amor y nada más.
Con gozo compartimos estas líneas en las que deseamos expresar el GRAN EVENTO, que tuvimos en nuestra iglesia en la noche del 4 de noviembre.
Nos congregamos en vigilia de oración, con la adoración al Santísimo, con la presencia de todo el Seminario Mayor, tan querido por cada una de nosotras, Mínimas y de tantos jóvenes que llenaron la iglesia. Y fuimos convocados para dar gracias a Dios por la fidelidad de dos seminaristas de Daimiel que al día siguiente iban a recibir el Orden del diaconado: Francisco José y Carlos.
Todo fue preparado con gran entusiasmo por los seminaristas compañeros. Tuvimos también a los formadores y al Rector, quien en su homilía nos ayudó a vivir este momento de gracia y a saborear el don de Dios por su llamada a hombres y mujeres de toda condición, para seguir los pasos de Jesús, el HIJO, pasos evangélicos y evangelizadores.
El mismo Rector nos comentaba gozoso cómo la oración compartida en la Vigilia fue un buen momento para este encuentro con el Señor, y para dar gracias a Dios. Ciertamente la relación y comunión con la vida contemplativa es un bien para nuestro Seminario, nos decía.
Y continuaba: la ‘vocación’ a la vida consagrada o sacerdotal es cuestión de amor, es apasionamiento ‘padecido’, recibido, regalado, donado desde su Pasión, Amor a la Voluntad del Padre. Sólo así entiendo la ‘locura’ de embarcarse con Él hacia la muerte, hacia el des-vivirse…
Sólo quiero agradecer en nombre de todas mis hermanas, la presencia de nuestros hermanos en la vigilia del viernes en nuestra iglesia, ¡cuánto bien para nosotras y tantos hermanos y hermanas! Una de las afirmaciones centrales: LA VOCACIÓN ES CUESTIÓN DE AMOR, ha sido escuchada por las nuevas generaciones, que son la esperanza de la Iglesia en Daimiel. Todos salimos enardecidos, ilusionados, con más alegría y deseo de entregarnos a Cristo y a su Iglesia.
Que haya siempre nuevas respuestas a la llamada del Señor, es nuestra oración continua, a la vez que pedimos por la fidelidad y santidad de los que caminan con ilusión en su respuesta vocacional.
Monjas Mínimas Daimiel
Podéis leer testimonio de Carlos: http://www.seminariociudadreal.com/noticias/noticias_html_MMtmp11591a57/Entrevista%20Carlos%20Ferrero.html
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