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A MARÍA SANTÍSIMA
En las incertidumbres y dudas diré a mi dulcísima Madre:
O María fons amoris et vía lucis respice in me quia proposui pro luce tehabere semper quoniam inestinguibile est lumen tuum. Amen.
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Además de todos los ejercicios ya dichos también rezaré todos los días que me sea posible el Santísimo Rosario entero a esta celestial Princesa, la Virgen Santísima mi amantísima Madre. La primera parte en satisfacción de mis enormes pecados, por todos mis hermanos los pobres pecadores y por el eterno descanso de las Stas. Almas del Purgatorio. La segunda por nuestro Santísimo Padre, por todos los Prelados, Sacerdotes, Religiosos y Religiosas, para que todos sean llenos del amor de Dios, para que todos cumplan sus cargos y obligaciones, para merecer la victoria y el triunfo de la Santa Iglesia. La tercera en honor y gloria de la Santísima Trinidad, por las grandes prerrogativas que adornan la Purísima Inmaculada Concepción; por todos los Santos y Santas, Santos Angeles, Santas de mi nombre N. N. y de mayor devoción, entre los cuales pido la protección del Patriarca San José, Santa Teresa de Jesús, mi amadísimo Padre San Francisco, mis Santos Hermanos el Beato Gaspar y Beato Nicolás suplicándoles nos alcancen del Altísimo la prosperidad y aumento de esta Religión Mínima, la guarda del voto de la vida cuaresmal y demás Reglas, para que imitando sus virtudes seamos dignas hijas del Mínimo máximo y hermanas de sus Santos hijos. También rogaré por todos los que sean encomendados a mis pobres oraciones, por la exaltación y feliz gobierno de la España y otros fines particulares.
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